13 de octubre de 2010

Es muy poco de amor, sólo una vez por semana.

Sigamos con mis cosas.
Estas dos novelas en su momento las supe casi casi de memoria. Mujercitas me lo regaló mi abuela cuando tendría siete años o algo así, y me lo devoré, y al otro año me trajo la continuación, es decir Señoritas. Más adelante, las volví a leer, y otra vez y otra vez, y siempre fui descubriendo cosas nuevas porque, como tiene que ser, me fue cambiando la cabeza y las fui analizando con otros ojos. Bueno, la historia sigue con los hombrecitos de Jo, pero a estas dos les tomé un amor especial, me hacen acordar demasiado a mi abuela y a mi cuando era más chica. Son historias de hace dos mil años, que tienen muy poco que ver con la juventud de hoy en dia, pero que eran puras e inocentes y lograron que, al ser muy chica, me apegue a los personajes y los quiera como recuerdos de otros tiempos.
Gracias abuela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario